El papel de la familia en el desarrollo de la regulación emocional en adolescentes

Abstract

La familia constituye el cimiento sobre el cual los hijos desarrollan la capacidad de gestionar las emociones, una habilidad esencial para su bienestar y equilibrio. El entorno en el que crecen y las relaciones que establecen con sus figuras de referencia juegan un papel determinante en la forma en que aprenden a regular sus emociones y afrontar los desafíos cotidianos. En este sentido, este estudio se centró en identificar los factores del entorno familiar que promueven la regulación emocional en adolescentes y establecer estrategias adecuadas de regulación emocional en función de dicho entorno. El estudio se realizó bajo un enfoque mixto, de corte transversal, diseño no experimental, de alcance descriptivo, exploratorio y correlacional; a través de la técnica de revisión sistemática. La muestra estuvo constituida por 10 artículos científicos (6 280 participantes), provenientes de países como Ecuador, Perú, México, Estados Unidos, España y China; documentos extraídos de Pubmed, Springer Link, Dialnet y Redalyc. Los resultados destacaron que la calidad de los vínculos familiares, el apoyo constante, la cohesión, una comunicación efectiva, la claridad en roles y funciones, así como la aplicación de estrategias adecuadas como la reevaluación cognitiva y la conciencia plena, constituyen pilares fundamentales para potenciar las habilidades emocionales en los adolescentes. Un entorno familiar sano no solo fomenta la regulación emocional, sino que también contribuye al fortalecimiento de la resiliencia y la adaptación ante desafíos propios de esta etapa. En consecuencia, esta investigación reafirmó la importancia de construir espacios familiares enriquecedores que promuevan el crecimiento emocional integral de los adolescentes, consolidando a la familia como un factor indispensable para su desarrollo pleno y saludable