Ordenar en el código del trabajo el desistimiento de la demanda por la inasistencia en la audiencia preliminar por parte del actor

Abstract

La primera parte del Art. 580 del Código del Trabajo expresa que si no asiste el demandado a la audiencia preliminar se tendrá como negativa pura y simple de los fundamentos de la demanda y se procederá en rebeldía, situación que será considerada para el pago de costas judiciales. Por lo tanto la inasistencia del demandado a esta audiencia produce tres efectos: negativa pura y simple de los fundamentos de la demanda, debe proseguirse el juicio en rebeldía y, además, debe condenarse al pago de las costas judiciales. Es importante señalar que la inasistencia de una de las partes a la audiencia preliminar le resta considerablemente sus posibilidades de acción, puesto que durante aquella especialmente se traba la litis y se solicita la práctica de pruebas, hechos de enorme relevancia y que pueden resultar fundamentales en la estrategia procesal que las partes deben anticipadamente definir sin perjuicio de que, a pesar de su inasistencia, pueda solicitar aquellas pruebas que ejecute en la audiencia definitiva. La inasistencia del demandado a la audiencia preliminar surte efectos de negativa pura y simple de los fundamentos de la demanda y el juez debe sancionarla al momento de fijar las costas judiciales, aparte de declararlo en rebeldía si la contraparte así lo acusa. Mientras que la inasistencia del actor no debe ser considerado como desistimiento de la demanda, puesto que la ley no le otorga expresamente dicho efecto aunque estimo que así debería hacerlo para disuadir a que no se presenten demandas de manera fraudulenta o con evidente mala intención. Es así que el Código del Trabajo no establece ningún efecto de la inasistencia del accionante a la audiencia preliminar, este vacío que acusa la Ley, consideramos que debe prescribir de las partes deben concurrir, obligatoriamente, a la audiencia preliminar en forma personal y acompañadas de sus respectivos abogados: si el accionante no comparece se considerará que ha desistido de sus pretensiones y se archivará el proceso. Esta es una consecuencia grave pero muy necesaria a fin de poner orden en la actividad judicial y evitar la pérdida de tiempo del juez y de los empleados. El desistimiento implica el fin del proceso y la imposibilidad de ser planteado de nuevo; por lo tanto, se pierde el derecho. En este caso se trataría de un modo unilateral de conclusión del proceso.