LA EXIGENCIA DE LA DECLARACIÓN PATRIMONIAL POR PARTE DEL SERVICIO DE RENTAS INTERNAS (SRI), ATENTA CONTRA EL PRINCIPIO CONSTITUCIONAL DE DIGNIDAD Y PRIVACIDAD DE LAS PERSONAS

Abstract

La presente Tesis contiene un estudio de la realidad socio jurídica ecuatoriana, en cuanto se refiere a que “LA EXIGENCIA DE LA DECLARACIÓN PATRIMONIAL POR PARTE DEL SERVICIO DE RENTAS INTERNAS (SRI), ATENTA CONTRA EL PRINCIPIO CONSTITUCIONAL DE DIGNIDAD Y PRIVACIDAD DE LAS PERSONAS”, lo que me parece un tema de suprema actualidad, puesto que en los actuales momentos, cuando a través de un Decreto Gubernamental, se nos obliga a todos los ecuatorianos y a quienes residan en nuestro país, cuyo patrimonio exceda los doscientos mil dólares norteamericanos, en forma individual, o los cuatrocientos mil dólares estadounidenses, en forma conyugal o en unión de hecho, a realizar una declaración patrimonial, que resulta ser, no sólo atentatoria contra la dignidad y contra la privacidad de las personas, sino que es altamente violatoria a expresos derechos y principios constitucionales. Convencida como la que más, que es deber de todo ecuatoriano, participar en el análisis de asuntos que interesan a la sociedad en su conjunto, como el que se refiere a la declaración patrimonial, de acuerdo a mi formación académica, mi investigación del tema es de carácter estrictamente jurídico y en tal condición, no pretendo colocarme a favor de la administración pública o de quienes deban realizar dicha declaración en calidad de contribuyentes, pues es mi obligación como postulante a obtener un título en leyes, referirme a las disposiciones legales y explicar su alcance, a fin de que tal declaración sea ubicada en su correcta dimensión jurídica. Considero además en las conclusiones de este informe final de tesis, que frente a la inquietante y constante preocupación por parte de la ciudadanía alojada en nuestro país, esta malhadada disposición a través de un Decreto Ejecutivo, debe ser derogada y sustituida por la real declaración patrimonial que todo ciudadano hace al ingresar, ascender, renunciar, o retirarse de un cargo público, pues está sobreentendido que son quienes pueden cometer actos de enriquecimiento ilícito; ya que además al realizar la revelación de los bienes inmuebles, bienes muebles y enseres, menaje de hogar, colecciones, títulos valores, inversiones, semovientes, obras de arte y joyas, éstos ya pagaron un impuesto al momento de su transformación, importación, adquisición e incluso anualmente con tasas como el predio urbano o rústico, o impuesto a la renta, resultando entonces absolutamente ilógico volver a realizar una nueva declaración, cuando todo está legalmente declarado y registrado.