Fundamentos epistemológicos sobre la prueba en el proceso penal ecuatoriano bajo el prisma del derecho procesal contemporáneo

Abstract

La producción y valoración de la prueba en el proceso penal ecuatoriano se basa en concepciones teóricas que permiten orientar la búsqueda de la verdad y su establecimiento de modo pleno, objetivo, contrastable y enteramente fundamentada, trabajando como posibles hipótesis científicas. Las tesis del subjetivismo gnoseológico que predominaron en el contexto teórico doctrinal hasta la primera mitad del siglo XX y sirvieron de sustento científico a las legislaciones europeas de este período, no permitieron orientar la búsqueda y establecimiento de la verdad en el proceso penal sobre bases objetivas y de modo pleno, contrastable y fundamentado. Las concepciones teóricas sobre las que descansa la búsqueda de la verdad y su establecimiento en el proceso penal ecuatoriano se corresponden con las tesis del subjetivismo gnoseológico. Se plantea la importancia de las reflexiones de la epistemología que se hace sobre la prueba judicial. La validez es una temática que lleva a estudiar, principalmente la veracidad de lo actuado, ya que la prueba judicial en su obtención y valoración tiene la potencialidad de afectar a la persona en todos los aspectos de su vida existencial: el corporal, el psicológico y el social; lo cual también puede implicar la vulneración de los derechos fundamentales. De otro lado, la valoración de la eficacia conlleva, principalmente, a reflexiones epistemológicas de la verdad sobre los hechos. Se analiza la verdad por correspondencia como el ideal. También se estudian las concepciones de verdad consensuales, coherentes y pragmatistas que han sido enarboladas como negación de aquélla. 3 En su obtención, la validez de la prueba se relaciona con el debido proceso. Existe una validez formal que se refiere a los condicionamientos de órganos legítimos y a las formalidades del tiempo, lugar y modo de obtención del acto procesal probatorio y la validez material, la cual se relaciona con la formalidad de los contenidos constitucionales: este último se refiere básicamente a que la decisión del Juez respete el principio de proporcionalidad lo mismo que el de racionalidad en su argumentación sobre los hechos como condición de legitimidad de la decisión. Para entrar en el campo del proceso, tenemos que partir de su origen, cave entonces preguntarse: ¿cuál es el origen del proceso? Al respecto el proceso nació por la necesidad de los Estados de resolver los conflictos de relevancia jurídica, que en esencia implica el quebramiento de las normas que el propio estado impone en ejercicio de sus funciones legislativa, administrativa y judicial; es este conflicto, el que origina las formas de solución, una de las cuales las constituye el proceso, donde está inserta la prueba, tema que es materia del presente artículo, recordando que en general, son objeto de prueba los hechos afirmados por las partes dentro del proceso dispositivo, pero con la intervención del juez como director del mismo, pues el proceso no es de pertenencia de las partes, sino que sus formas son de orden público.