El turismo rural comunitario y la influencia en el desarrollo de la parroquia Quinara, cantón Loja

Abstract

Al Sur de la Provincia de Loja y unido al Valle de Vilcabamba, ubicamos la parroquia rural de Quinara del cantón Loja. Fue fundada en mayo de 1994, la plaza central es el parque, cerca del mismo queda la iglesia. El río Piscobamba, nace en las estribaciones de la cordillera de Sabanilla y durante su recorrido recibe las aguas de varios ríos y quebradas hasta pasar por este sector. La parroquia Quinara, conocida a nivel mundial en base a la leyenda del Tesoro de Quinara y que de acuerdo al historiador Pío Jaramillo Alvarado en su libro Historia de Loja y su Provincia, relata la existencia de los siete guandos de oro, enterrados en esta población en base a un ceremonial luego de la muerte de Atahualpa y que en base a estas versiones, se realizaron varias investigaciones y excavaciones para encontrar el codiciado tesoro. Este lugar habría tomado el nombre de Quinara, porque formaron un campamento indio y el jefe del mismo se llamaba Quiñág.

Para la investigación, se elaboró una revisión de los conceptos: medio rural, turismo, turismo rural, desarrollo endógeno, enfoque territorial como propuesta de desarrollo, que permitió enmarcar el proyecto. Se investigó las potencialidades, atractivos, actividades organizacionales, actividades productivas, servicios turísticos, atractivos turísticos, destrezas turísticas e infraestructura de servicios en la parroquia Quinara. Así mismo, se determinó el aporte del turismo rural comunitario en el cambio del estado de desarrollo de los habitantes de la parroquia Quinara, bajo el enfoque de “desarrollo humano sostenible”. Además de ello, se obtuvo información de las caracterizaciones naturales, para con la socialización del proyecto, analizar y determinar las actividades cotidianas que formarían parte de la o las propuestas de turismo rural comunitario.

Con estos resultados se establecieron tres tipos de ofertas y en concordancia con la realidad de la parroquia; se seleccionó la mejor opción, de manera conjunta con los participantes en los talleres. Siendo esta oferta la “Desarrollada por grupos organizativos, bajo la modalidad de comunidad (asociatividad).” Una vez establecida la propuesta ideal de turismo rural comunitario y en los talleres posteriores; se consideró que era importante, que previo a la implementación y desarrollo de la propuesta, era necesario tomar en cuenta siete puntos significativos; dentro de cuatro áreas: gastronomía, hospedaje, servicio turístico y alternativas productivas, esto con el fin de establecer con mayor exactitud las ofertas de la comunidad y detectar las carencias.

Con las encuestas aplicadas y los talleres participativos, se detectaron conflictos, originados por la falta de interés en establecer acciones que beneficie a toda la parroquia; además de ello, la falta de comunicación entre los diferentes grupos de actores locales interesados o afectados por la actividad turística. Por tal razón se buscó en consenso soluciones y se estableció compromisos comunes, para obtener los resultados deseados que contribuyeran al “desarrollo humano sostenible”. Fue importante mostrar las experiencias de proyectos relevantes de turismo rural comunitario, de otros países; como Costa Rica, puesto que este es uno de los países con mayores programas en turismo comunitario en Centro América. Se tomó como modelo estas iniciativas y se socializó con los participantes, lo que han logrado los habitantes con estos proyectos, con la finalidad de crear conciencia que es indispensable el trabajo en equipo.

Los objetivos que guiaron esta investigación fueron: - Identificar las potencialidades culturales, productivas existentes en la parroquia, que podrían ser aprovechadas por el Turismo Rural Comunitario. - Elaborar una propuesta alternativa de Turismo Rural Comunitario, para la parroquia Quinara.