Tipificar la penalización de conductas delictivas que identifican las parafilias criminales, dentro del capítulo ii, del título viii, del libro ii, del código penal del ecuador

Abstract

Resumen. Las figuras delictivas, son el resultado de acciones sociales de las personas que nacen como consecuencia de la transgresión de bienes jurídicos previamente tutelados por el Estado, las leyes penales son impuestas mediante preceptos que amenazan con penas, para aquellos que han infringido derechos fundamentales preceptuados por la normativa que regula las relaciones jurídicas de los individuos. En cuanto a los delitos sexuales que atañan la conducta dañosa de un individuo, cuyo mal se desprende de alteraciones psico-delictivas, como el caso de atacar el pudor de las víctimas o bien mantener relaciones con animales (bestias), o actuar dañosamente contra la sexualidad de las personas (homosexualismo), se incorporan como delitos que tiene como antecedentes estudios médicos legales, que ubican en el problema en la “parafilia”, cuya singularidad atiende un efecto que ha salido de las teorías de la psiquiatría, y más bien se han ubicado en la criminalidad, es precisamente el tratamiento de estudio que se desarrolló en el desarrollo de la literatura y que se adoptaron como alternativas apropiadas en el marco de la Constitución y la Ley. El trabajo se concretó a distinguir la particularidad con la que se conducen ciertas personas que provocan los tipos penales en referencia, se han visto ciertas doctrinas que proponen estudios singulares que relacionan el comportamiento humano, para ubicarlo precisamente en la conducta criminal que pretendió el problema planteado como objeto principal de estudio, se abordan teorías concretas y un análisis profundo en cuanto a las acciones que la psiquiatría ubica como actos dolosos como vicio del consentimiento, por lo tanto, conductas criminales que se ubicaron en la parafilia delictiva. Por otro lado, la investigación de campo que sugirió la oportuna solución al conflicto desde el punto de vista jurídico y direccionado al beneficio social, mirando la adecuación puntual de las conductas tipo que se propusieron previamente en el ámbito de las circunstancias que generaron el conflicto de acuerdo al ordenamiento en vigencia, cuyos vacíos resultan adecuados para ser aplicados por la administración de justicia, viendo el punto de vista de la moralidad y de bienes jurídicos como la honestidad, la salud, la integridad física, psicológica y sexual de la víctima.