Agréguese al articulo 142, del código orgánico integral penal, las agravantes-ocultamiento del cadaver, utilizaciones de sustancias psicotrópicas en mujeres discapacitadas, con el fin de evadir la responsabilidad penal

Abstract

En los últimos 20 años el Ecuador ha tenido mejoras significativas en el estatus político y social de las mujeres, logros que son sin embargo insuficientes de cara a las grandes brechas de desigualdad y discriminación por causas de género, etnia, clase y territorio que aún persisten en nuestra sociedad. Entendiéndose también que es un tema que para muchas mujeres se ha manejado con mucho estigma y vergüenza, considerando que a muchas mujeres, no son conscientes de que están siendo maltratadas, ya que crecieron en un ambiente parecido y hasta cierto punto lo asimilan como normal, sin llegar a presentar denuncias para evitar los maltratos, lo que ha llevado a que muchos casos de violencia no sean denunciados por las victimas ante las autoridades, como tampoco al personal médico de los centros hospitalarios, lo que ocasiones que el circulo de violencia continúe y en muchas ocasiones llegan a sufrir graves consecuencias médicas, incluso pueden llegar hasta a ser asesinadas, pero los delincuentes a más de cometer estos irrepudiables actos, también deciden con el fin de evitar su responsabilidad, tratar de invisibilizar el hecho cometido, ya sea ocultando el cadáver o convencer u obligar a mujeres discapacitadas a consumir sustancias psicotrópicas a fin de culparles de su muerte. La Constitución de la Republica en su artículo 66, numeral 3 literal b, menciona el derecho a una vida libre de violencia en el ámbito público privado. El Estado adoptará las medidas necesarias para prevenir y sancionar toda forma de violencia, en especial la ejercida contra las mujeres, niñas, niños y adolescentes, personas adultas mayores, personas con discapacidad y contra la persona en situación de desventaja o vulnerabilidad, idénticas medidas se tomará contra la violencia, la esclavitud y la explotación sexual. La realidad del problema es el resultado de muchos factores, tanto individuales como la propia experiencia en la infancia acerca de violencia, las leyes, las normas sociales sobre violencia, la cultura de machismo y paternalismo impregnada en la sociedad. El Código Orgánico Integral Penal en el artículo 11 determina al delito de femicidio como: la persona que, como resultado de relaciones de poder manifestadas en cualquier tipo de violencia, dé muerte a una mujer por el hecho de serlo o por su condición de género, será sancionada con pena privativa de libertad de 22 a 26 años. La violencia contra la mujer constituye una de las principales formas de agresión y a la vez una de las menos reconocida en la sociedad, ya que incide directamente sobre el pleno ejercicio de los derechos humanos, sean estos civiles, económicos, sociales y culturales, alcanzando grandes proporciones, dándose este tipo de violencia, tanto ejercida por sus parejas como por hombres con los que no comparten su vida. En el artículo 142 se detallan 5 agravantes al delito de femicidio, mismas que no consideran algunas otras situaciones que se pueden dar como agravantes, por ello se hace imperiosa la necesidad de realizar un estudio e investigación sobre la presente problemática, con el fin de determinar la insuficiencia o carencia que tiene la normativa penal actual e incluir al ocultamiento del cadáver y a las utilizaciones de sustancias psicotrópicas en mujeres discapacitadas como nuevas agravantes, en vista que son actos que comúnmente se pueden dar .